Malena
sólo se alimenta de vida,
y sale
cada mañana a las calles
a beberse
las esquinas,
a respirar
los vapores
que emanan
de las sentinas
del barco ante
la tormenta,
que es al
fin y al cabo su vida…
Malena no
tiene tiempo
de quitarse
las espinas,
pues de
sus tiempos de rosa
ya no
quedan,
ni el
aroma de sus pétalos
ni el grácil
porte de su tallo
ni el
color en sus mejillas…
Malena
vive su verdad
acodada en
la mentira,
es como un
barco en derrota
navegando,
en su particular ventisca,
es como
aquel ruiseñor enjaulado
q ya no
vuela libre ni en su mente
ni en cada
trino que aún le reste a su vida..
Malena
busca su equipaje perdido
entre la
gente,
y el humo
de las cantinas.
Malena
vive de pie mientras
su mundo de
adolescente
se va a la
deriva por alguna alcantarilla
esperando día
tras día
que después
de la ficción
pueda
también llegar el clímax…
Malena
pinta con lápiz de labios
sus
vergüenzas
y una sarta
de mentiras
quizás va
en busca de lo que fue
y no pudo
ser,
mientras
un débil halo de energía
poco a
poco, lentamente,
se escapa por
las murallas
de su
garganta marchita,
mientras
escucha allá en la lejanía
el tono de
una voz quebrada y ya sin vida,
que la
llama por su nombre
y le agarra
dulcemente de la mano
invitándola
a cruzar
hacia el ocaso
de sus días…
Esta
mañana de helada escarcha
y café frio
sin sonrisas
me llegan
rumores tristes
empujados
por la brisa,
alguien encontró
una paloma moribunda
que estaba
casi ya sin vida,
en uno de
esos discretos callejones
cuyo
nombre no es noticia,
de esos a
donde viajan las almas atormentadas
buscando
respuestas que casi nunca encuentran…
Un saludo y espero que os guste
Fotografía: Autor desconocido al que agradezco esta hermosa foto del barrio gótico de Barcelona para ilustrar mi poesía.