"Dedicado a todos aquellos que intentamos nadar contracorriente en el ámbito cultural de las Islas Canarias"

5 de febrero de 2012

NADA DE NADIA

-->
Siempre supe que te irías, siempre intuí que lo que la vida te daba, ella misma, algún día te lo quitaría, pero jamás intuí que el dolor de la ausencia tanto dolería, que la prisión que es el cuerpo en soledad en mil llamas prendería, pensé que sólo con soñar, amar y volver a soñar sería suficiente, pero erré como el que hierra una y mil veces…

En este instante de soledad y desgana, quiero acercarme a tu recuerdo desnudo de prejuicios y obsesiones para intercambiar con el destino secretos enterrados en palabras, puede que así me permita la vida desterrarlos cuanto antes al olvido, ahora que ya no te siento cercana…

Nadia, de tus risas y mis lágrimas ya habrás podido intuir que ha sido de mi y de mi vida en estos años, lo que de ti en ella aún me queda, te lo entrego sin rencor, son sólo efímeras hebras de escarcha que al derretirse en gotas de lluvia lentamente se convierten…

Nadia, probé de ti como de la soledad probé también, y os confieso que a ambas os deseé a dentelladas cuando de vosotras carecía, por eso me refugié en la inconstancia del necio aquel que ansiaba ante el roce de otros labios la respuestas que en vano andaba buscando...

Nadia, me he atrevido temerario a componer para ti estas estrofas con miradas rescatadas, sin saber que al pactar con ellas negociaba poco a poco el extravío de mi alma, por eso hoy te compongo esta balada mil otras veces recitada y que en su lenta agonía ha aprendido poco a poco a no sonar como antaño acostumbraba…

Nadia, sin saberlo, con tu marcha, pagué al destino una y mil veces mi arrogancia, y por tan sólo aventurarme a respirar otros aires que seducido ambicionaba, tropecé con la inconstancia de perder en cada una de mis noches tus mañanas…

Nadia tantos años habrán de llegar que de ellos sólo espero el indulto que causó el dolor de mis traiciones y que el tiempo generoso permita desterrar de su boca tus reproches Hoy como reo condenado en la ignorancia, ya sólo aspiro en soledad a no atentar cada día desgarrando con tu nombre mis entrañas…

Nada de Nadia, es tan sólo ahora en mi memoria un fútil juego de palabras, un leve rastro de humo entre cenizas olvidadas, tan sólo un pájaro enjaulado que simplemente aspira ya a volar en su atalaya, como antaño un santo de cruz versara: “estás absurdas letras son ya tan sólo palabras que se pierden en la más fría noche oscura del alma.”
Adiós, mi amada Nadia…



Un saludo y espero que os guste

0 comentarios :

Publicar un comentario